Una de las luchas más intensas por la justicia social en Estados Unidos, con miles de manifestantes saliendo a las calles para exigir el fin de las políticas de inmigración consideradas injustas por muchos

Xalapa, Ver. - El 6 de junio, comenzaron las protestas en Los Ángeles tras el arresto de al menos 45 personas por parte del (ICE). El 7 de junio, cuando las protestas se convirtieron en disturbios callejeros, Trump anunció que se desplegaría la Guardia Nacional para sofocarlos, autorizando el envío de dos mil soldados. 

Éste movimiento que ha sido un grito más de resistencia frente a la agresiva política de deportaciones y detenciones que afectan principalmente a comunidades inmigrantes. Ha alcanzado un punto crítico, con un incremento de protestas en varias ciudades clave como Nueva York, Los Ángeles y Chicago. 



Éstas han ganado más visibilidad a medida que la comunidad internacional se une a los llamados de los activistas, y la presión sobre el gobierno estadounidense crece por la necesidad de reformar el sistema de inmigración.

Un punto clave en estas manifestaciones es el rechazo al ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas), una agencia acusada de llevar a cabo detenciones arbitrarias y abusivas, separando familias y dejando a muchas personas en situaciones precarias. Grupos como Families Belong Together y La Resistencia han sido protagonistas de las movilizaciones, organizando marchas, protestas frente a oficinas del ICE y actos de desobediencia civil.

En las calles, los mensajes son claros: “No más detenciones. No más separaciones.” Es lo que la gente pide, las pancartas que exigen la abolición del ICE se han convertido en una imagen recurrente. 

Por: Luis Ángel Díaz